miércoles, 17 de julio de 2013

3 Tips para mantenerte positivo

Cuando enfrentas un reto o fracaso es difícil no ser negativo. Estos ejercicios entrenarán a tu cerebro a ser más optimista.

Por Nadia Goodman

Como emprendedor, aceptar los retos y los fracasos es esencial para el éxito de tu negocio. Y puedes aprender a cultivar esta actitud si entrenas a tu cerebro para mantenerse positivo, aun cuando los tiempos son difíciles.

“La gente tiende a tener una base cognitiva hacia sus fracasos y hacia lo negativo”, afirma Matthew Della Porta, psicólogo y consultor empresarial. Nuestros cerebros suelen buscar la información negativa y a almacenarla más rápido en la memoria. 

Esta base no siempre es mala. Reconocer los problemas y afrontar los fracasos nos puede dirigir hacia mejores soluciones. Sin embargo, constantemente vamos más allá y estos fracasos acaban abrumándonos o afectando nuestra actitud, autoestima y desempeño. 

Al incrementar conscientemente nuestro enfoque en lo positivo, empezamos a equilibrarnos. Podemos encontrar el punto medio feliz donde seamos capaces de enfrentarnos a los retos y fracasos sin dejar que éstos nos depriman, manteniéndonos motivados y productivos.

Estos tres ejercicios te ayudarán a entrenar a tu cerebro a que se mantenga positivo: 

1. Expresa agradecimiento
Los eventos negativos suelen permanecer mucho tiempo en nuestros cerebros a menos de que los balanceemos conscientemente. “Cuando te enfrentas a retos, es importante destacar aquello que sí está bien”, dice Della Porta. Pensar en las cosas buenas de tu vida puede ayudarte a balancear tu pensamiento, dándole a tu cerebro tiempo extra para registrar y recordar situaciones positivas.

Para ayudarle a tu cerebro a almacenar estos recuerdos felices, haz una reflexión diaria o semanal de aquello por lo que estás agradecido. Escribe las bendiciones que tienes, ya sea tu familia, tus amigos o trabajar en aquello que te gusta. Es preferible que lo hagas todos los días y lo conviertas en un hábito.

2. Repite afirmaciones positivas
Como lo sabe cualquier político o publicista, cuanto más escuches un mensaje, más probable es que te lo creas. Lo mismo ocurre con los mensajes sobre quién eres y de lo que eres capaz de hacer. Al repetir estas afirmaciones positivas con convicción muchas veces en la mañana, entrenas a tu cerebro a que se las crea. “Con el tiempo conseguirás interiorizarlas”, afirma Della Porta.
 
Elige dos o tres afirmaciones que representen tus valores y metas como “Me estoy volviendo mejor cada día”. La repetición influirá la forma en la que interpretas los eventos negativos. “Especialmente si eres de la clase de personas que se predispone a lo negativo, este ejercicio es extremadamente efectivo”, señala el experto. 

3. Reta a los pensamientos negativos
Cada vez que se nos ocurre un pensamiento negativo, nosotros elegimos cómo responderemos a él. Nuestros cerebros tienden a pensar en los eventos negativos de tal forma que parecen mucho más grandes y significativos que lo que realmente son. Para combatir eso, empieza a imaginar el pensamiento como algo ajeno a ti, como algo que puedas observar y destruir. 

9 estilos de liderazgo que debes tener y cultivar

Conoce los rasgos que debes tener, cultivar o buscar en el resto de tu equipo para dirigir con éxito tu negocio.

Por Martin Zwilling

Muy pocas personas conocen su estilo de liderazgo, o, mejor dicho, sus fortalezas y debilidades. Sin embargo, esto es un error. Para liderar una empresa como para contratar empleados, necesariamente debes saber en qué eres bueno y en qué aspectos necesitas ayuda para alcanzar las metas del negocio. Podría decirse que es aún más importante desarrollar habilidades de liderazgo que de negocios para conseguir el éxito de un negocio.

Pero, claramente, estas habilidades no siempre son innatas. Para la mayoría de los emprendedores, se requiere de mucho trabajo para cultivarlas. Para descubrir en dónde estás y cómo alcanzar tu máximo potencial existe una gran diversidad de cursos, seminarios y gurús. Pero un buen lugar para empezar es un libro sobre llamado Intelligent Leadership (Liderazgo Inteligente), escrito por John Mattone. En éste, Mattone comparte su experiencia ayudando por años a líderes que aparecen en el listado de las 500 de Fortune a superar sus límites y adoptar hábitos de liderazgo. 

En el libro, el experto identifica y hace la distinción entre nueve rasgos de liderazgo que ve en todos los emprendedores, en algún punto. Los empresarios más efectivos son aquellos que conocen sus rasgos dominantes y saben construir un equipo que supla lo que él no puede cubrir. 

Te compartimos los nueve rasgos de liderazgo que debes cultivar en ti o que debes buscar en el resto de tu equipo. En todos los casos, recuerda que para alcanzar tu máximo potencial de liderazgo debes ser auténtico y mantenerte fiel a tus principios:

1. Ayudantes
Los ayudantes maduros son los más considerados y sensibles de todos los tipos de liderazgo. Son excelentes mentores y coaches, pero tienen una fuerte necesidad de ser admirados y respetados a cambio. Puedes fortalecer este rasgo siendo más consciente de tu necesidad de agradar, y no ser posesivo o controlador. 

2. Entretenedores
Los entretenedores ganan el respeto de los demás con empuje, determinación, trabajo duro y la habilidad de ganarse a la gente. Pero pueden fijarse con el hecho de ‘verse’ exitosos, mostrando más estilo que sustancia, inflando su importancia o con la necesidad de siempre ganar. 

3. Artistas
Los artistas son quizás los líderes más creativos e innovadores. Éstos tienden a mover a la gente profundamente y a sacar lo mejor de ellos. Conforme más maduran, obtienen mayor inspiración de otros que de sí mismos. Puedes mejorar tu lado artista evitando la negatividad, la pereza y enfocándote en la disciplina. 

4. Pensadores
A los pensadores les gusta analizar el mundo que los rodea y podrían preferir pensar que actuar. Los pensadores maduros entienden rápidamente los problemas y saben explicárselos a los demás; también toman decisiones lógicas. Puedes fomentar este rasgo no saltándote a las conclusiones, buscando consejos y trabajando con otras personas en quienes confíes. 

5. Discípulos
Los discípulos son capaces de formar grupos de trabajo fuertes, pero a veces son incapaces de actuar sin tener permiso de una autoridad, por lo que no suelen buscar posiciones de liderazgo. Este rasgo puede fortalecerse aceptando responsabilidades, reduciendo la reacción al estrés y cortando cadenas de la autoridad.

6. Activistas
Los activistas son especialmente buenos levantando el espíritu de su equipo y generalmente son entusiastas y confiados. Tienden a sumergirse en varias actividades, pero a la vez pueden ser impulsivos y preferir la cantidad sobre la calidad. Los esfuerzos de mejora pueden incluir escuchar más a la gente, pensar en los detalles y aprender a decir que no. 

7. Conductores
Los conductores son los líderes más agresivos, ya que disfrutan estar al mando y pueden mejorar las cosas gracias a su autoestima. Desafortunadamente, podrían sentir la necesidad de dominar toda situación y tomar todas las decisiones. Los conductores maduros permiten que los otros ganen y saben co-equipar. 

8. Árbitros
Los árbitros tienden a ser los más abiertos; lo que ves es lo que hay. Encuentran formas de juntar a la gente e involucrar a todos. Para ser un mejor árbitro, necesitas ser más asertivo, abierto, compartir tus sentimientos y desarrollar tus habilidades para escuchar. 

9. Perfeccionistas
Los perfeccionistas maduros son capaces de ser grandes líderes, debido a su profundo sentido sobre lo que está bien y lo que está mal. Usualmente son muy críticos de ellos mismos y de los demás, y muchas veces se frustran con la realidad. Para mejorar, necesitan aprender a relajarse, escuchar a otros y recordar que nadie es perfecto.

sábado, 13 de julio de 2013

5 Claves para inspirar liderazgo

No importa cuál sea tu estilo  para dirigir un negocio, existen ciertas cosas que los líderes más exitosos hacen todos los días.

Por Gwen Moran

Olvida la imagen del típico líder abotonado en un traje cris, caminando con paso decidido portando un maletín de piel en la mano. Hoy en día, los líderes sobresalientes vienen en todos los tamaños y formas. Puede ser una estudiante de mercadotecnia vestida con jeans que dirige su propia y exitosa empresa de e-commerce; o el canoso y descalzo Steve Jobs presentando un nuevo dispositivo en una importante conferencia de la industria. 

“Nuestro estudio demuestra que lo que realmente importa es que los líderes sean capaces de crear entusiasmo, de empoderar a las personas, generar confianza e inspirar a la gente que los rodea”, dice Peter Handal, director de Dale Carnegie Training, una firma de entrenamiento en liderazgo. 


A pesar de lo diferente que son los líderes actuales, existen ciertas cosas que los mejores líderes hacen todos los días. Aquí Handal comparte estas cinco claves para un liderazgo efectivo:

1. Enfrenta retos
Los grandes líderes son lo suficientemente valientes para enfrentar situaciones retadoras y lidiar con ellas con honestidad. Ya sea superar algún obstáculo en la empresa o batallar por llevar a un empleado hacia el buen camino, los líderes efectivos aceptan estos retos abiertamente. Tener comunicación regular con tu equipo, informarlos de las buenas y malas noticias, así como la manera en que la empresa está reaccionando ante estos retos hará que los empleados sientan que confiaste en ellos y que no tendrán sorpresas desagradables. 


“El chisme en la máquina de café  es generalmente 10 veces peor que la realidad”, dice Handal. “Los empleados necesitan ver a sus líderes allá afuera, confrontando la realidad”. 

2. Gana confianza
Los empleados son más leales y entusiastas cuando sienten que trabajan en un ambiente dirigido por personas en las que confían. Es posible construir esa confianza de diversas maneras; la primera es mostrando a los empleados que te importan, dice Handal. Demuestra interés en tus empleados más allá de la oficina. Deja que tus empleados sepan que estás interesado en su éxito y discute con ellos sus caminos profesionales regularmente. 

Cuando un empleado comete un error no los reprimas o corrijas con enojo. En lugar, calmadamente explica la situación y por qué su comportamiento y acciones no fueron correctas, así como lo que esperas de ellos en el futuro. Cuando las personas saben que no vas a regañarlas y que tienes buenas intenciones, confiarán en ti. 

3. Sé auténtico
Si no eres un traje, no intentes serlo. Los empleados y cualquier otra persona relacionada con tu empresa podrá notar si estás fingiendo ser algo que no eres, dice Handal. Eso puede hacerlos cuestionarse qué más en ti es falso. ¿Tienes una pasión por los zapatos de moda? Póntelos. ¿Eres un buen presentador y te gusta contar chistes? Hazlos reír. Usa tus fortalezas y características de personalidad para desarrollar tu estilo de liderazgo único. 

4. Gana el respeto
Cuando te conduces de manera ética y ejemplificas las cualidades que quieres ver en los demás te ganas el respeto de aquellos que te rodean. Los líderes que son percibidos como que no “pregonan con el ejemplo” normalmente no llegan demasiado lejos. 

Esto contribuye a que los empleados sientan orgullo por la empresa, algo esencial para conseguir su lealtad. Asimismo, los consumidores estarán menos dispuestos a hacer negocios con una empresa si no respetan sus valores o liderazgo. 

5. Mantente curioso
Los buenos líderes se conservan intelectualmente curiosos y tienen un compromiso permanente con el aprendizaje. Son inquisitivos y siempre están buscando nuevas ideas e información. Handal dice que los mejores líderes entienden que la innovación puede surgir de diferentes lugares y constantemente buscan conocimiento o personas que puedan darles una ventaja. 

“Los líderes más exitosos que conozco son personas verdaderamente curiosas. Están interesados en las cosas alrededor de ellos, y eso contribuye a su visión”, afirma Handal. 

5 Secretos para tener éxito duradedo

Conoce cuales son los secretos que definen a los empresarios para alcanzar sus metas

Por Nadia Goodman

Jeff Brown, psicólogo de la Harvard Medical School y co-autor de The Winner's Brain (El cerebro del ganador), estudia a las personas altamente exitosas, observando su actividad cerebral e historias de vida para identificar las claves que las hacen únicas. Resulta que sí piensan diferente que aquellos que nunca llegan a obtener el éxito. “Las personas que son exitosas han aprendido a optimizar sus cerebros”, dice Brown. 

El experto ha develado estrategias, a las cuales llama “herramientas de poder cerebral”, las cuales usan las personas exitosas para conseguir sus metas. Cada herramienta es una forma de pensar que afecta tus decisiones y acciones conforme trabajas para alcanzar una meta. Todas juntas te ayudan a encontrar oportunidades, superar fracasos y cambiar el estatus quo. 

Toma nota de los cinco secretos de Brown para lograr el éxito duradero: 

1. Crea tu propio destino
Si observas a la gente altamente exitosa, su camino a la grandeza estuvo lleno de giros y cambios. “Las personas exitosas toman muchos circuitos”, dice Brown. “Tienen un truco para reconocer las oportunidades no tradicionales”. 

En lugar de esperar en una larga fila de sucesión, sigue caminos que otros no han intentado. Toma proyectos que añadan una habilidad única a tu caja de herramientas, encuentra formas de reunirte con personas que admiras o busca oportunidades inesperadas. No temas ser creativo; recuerda que hay muchas formas de llegar al mismo lugar. 

2. Identifica qué es lo que aportas
Las personas exitosas toman inventario de sus habilidades regularmente, y usan esto para darse retroalimentación y mejorar. “Si tienen un déficit, saben cuál es”, dice Brown. 

Pide a mentores y coaches que evalúen tus fortalezas y debilidades, y mide tus habilidades lo más objetivamente que puedas. Usa esa información para identificar qué debes aprender o practicar para dominar tus fortalezas y disminuir tus debilidades. No te alejes de las críticas por miedo u orgullo, recomienda Brows. “Ése es el beso de la muerte cuando se trata de éxito”.

 
3. Enfócate en una meta
La capacidad de elegir una meta y trabajar en torno a ella sin distraerte es una marca común en la gente exitosa. “Tienen gran enfoque, lo que potencia su capacidad para pensar y ejecutar”, dice Brown. 

Crea una lista de prioridades y úsala para seleccionar las oportunidades a seguir. “No te engañes por la ilusión de una oportunidad perdida cuando tienes todo para conseguirla”, afirma Brown. “Ponle llave a tu meta y no te distraigas”. 

4. Trabaja en el límite de tu zona de confort
Los riesgos son necesarios si realmente quieres sobresalir, y la gente exitosa toma riesgos con un sentido claro de qué tanto pueden soportar. “Pueden moderar los riesgos”, afirma Brown. “Están fuera de su zona de confort, pero tampoco están locos”. 

Pon a prueba tus propios límites buscando riesgos que te hacen sentir algo incómodo pero emocionado y ansioso al mismo tiempo. “Tienes un rango de riesgo óptimo que debes aprender a calibrar y entender”, reconoce Brown. Conforme más experimentes tomando riesgos, grandes y pequeños, más fácil será encontrar tu punto exacto en el futuro. 
 
5. Pon tu energía en el trabajo diario
Las personas exitosas trabajan sin cansancio para alcanzar sus metas. Están impulsadas por una energía interna que les permite seguir adelante, incluso cuando enfrentan fracaso o cuando el éxito parece lejano. “Siguen dándole al proceso e invirtiendo en él”, dice Brown. Su empuje no es demandante; es persistente. 


En lugar de ver hacia delante, hacia la meta final, sumérgete en la práctica diaria de construirlo. Aprender a disfrutar el proceso te ayudará a desarrollar la resistencia que necesitas. “Debes disfrutar la búsqueda del éxito”, dice Brown. “Esa persecución dura mucho más que el logro en sí”.  

jueves, 11 de julio de 2013

10 Consejos para mejor tu productividad en el trabajo

Trabajar mucho no es sinónimo de trabajar bien. Descubre como aprovechar al máximo tus horas laborales.

Por Juan Carlos Arias

La mayoría de los emprendedores y de los empleados trabaja más de tres horas extra al día. Además, según un estudio realizado por Yahoo! México, 6 de cada 10 mexicanos duermen con el smartphone a un lado de la cama y cerca del 80% de las personas encuentra imposible no revisar su correo fuera de la jornada laboral.
¿Pero es esto necesario? No. Trabajar tiempo extra es beneficioso para ti y la empresa únicamente cuando es estrictamente necesario. Pero hacerlo todos los días habla de una ineficiente organización personal y corporativa. Antes de cambiar las estructuras o la forma de trabajar en tu empresa, comienza por ti. Sigue estos consejos para organizarte y mejorar tu desempeño:

1. Levántate temprano
Empezar a trabajar antes es una gran técnica para aprovechar mejor el día. Si eres de los primeros en llegar a tu lugar de trabajo podrás comenzar tu jornada con menos distracciones (saludos innecesariamente largos, llamadas telefónicas inoportunas, entre otras), lo que te permitirá concentrarte en lo que necesitas hacer. Ciertamente, es difícil de llevar a la práctica, pero ten confianza en su efectividad.

2. Planifica tu jornada
La mejor forma de sacar provecho a tu día laboral es planificándolo. Dedica entre 20 y 40 minutos diarios a esta tarea y, por ningún motivo, pienses que es tiempo perdido. Todo lo contrario: la definición de una buena agenda de trabajo te permitirá priorizar con certeza y avanzar en los temas realmente importantes. 
Si lo haces día con día, finalmente mejorará tu "visión global" sobre tus tareas y serás capaz de anticipar reuniones difíciles o identificar nuevas tácticas para mejorar tu desempeño. Si llegas temprano, esos minutos de concentración serán tu mejor aliado al momento de planear tu día.

3. Ataca primero las tareas más difíciles
Prioriza y enfréntate a las tareas más complejas lo más pronto que puedas. Al iniciar la jornada tus niveles de concentración son mejores y tienes más energía. 

Resultado: resuelves los temas más difíciles con mayor rapidez y efectividad. La otra cara de la moneda es dejar todo para el final y arriesgarte a cometer errores por no estar en tus mejores condiciones físicas y mentales.

4. Dedícate a atender un tema a la vez
Si crees que ser multitareas es una ventaja, estás equivocado. La correcta planificación de tus actividades y la firme decisión de atacar primero las tareas más difíciles te permitirá, acto seguido, tener la capacidad para atender un solo tema cada vez. 
El objetivo es que realmente te concentres para resolver problemas o planear nuevos negocios o procedimientos. Además, lo harás en menos tiempo. En lo posible, evita distracciones y guíate por tu agenda de trabajo.

5. Descansa cada cierto tiempo
Cuando planifiques tu día, deja algunos espacios en blanco para descansar. Tu cuerpo y tu mente necesitarán pausas para recuperar energía.

Recuerda que descansar no es sinónimo de perder el tiempo. Puedes leer tu periódico preferido durante 15 ó 20 minutos, tomar un café al aire libre o tener una charla agradable. No abuses de las pausas y evita interrumpir a otras personas mientras te distraes.

6. Aprende a decir que no
Aunque suene lógico, un gran secreto para concentrarte en lo realmente importante es desatender las tareas intrascendentes. Si no aprendes a decir que no, es muy probable que tu agenda se llene de temas que quitan mucho tiempo y generan pocos beneficios para la empresa y para ti. Todo ello, sin contar el hecho de que toda tarea innecesaria ni se paga ni se agradece. Sé fiel a tu planificación y no te canses sin sentido.

7. Ordena tu lugar de trabajo y tu computadora
Tu espacio de trabajo, muy probablemente, tiene dos caras: una real (tu oficina, la planta, etc.) y una virtual (tu computadora). Y es imposible ser eficiente si este entorno está tan desordenado que puedes perder decenas de minutos buscando un archivo o ese documento importante que alguien dejó sobre tu escritorio. 

No se trata de "olvidar" todo en cajones o carpetas electrónicas para que se vea bonito. El único propósito de trabajar en un espacio ordenado es facilitar tu desempeño y, si es posible, estimular tu creatividad.

8. ¿Necesitas estar siempre disponible?
Las tecnologías de comunicación -léase correo electrónico, messenger, smartphone, redes sociales y buzón telefónico- son muy útiles si sabes administrarlas correctamente. Pero ojo, pueden transformarse en los peores enemigos de tu eficiencia.

Consejo: evita las distracciones de estar siempre online y aprende a utilizar con mesura estos servicios.

9. Divide tareas en actividades más pequeñas
Empieza cada día priorizando actividades, escribiendo y agendando cada una. Al separarlas en tareas más sencillas y cortas, tu cerebro responde mejor, disminuyes el estrés y alcanzas tus metas más rápido. 

10. Delega responsabilidades
Aquellas tareas que no te generen ganancias o que sólo te quiten tiempo delégaselas a alguien de tu equipo o contrata servicios de outsourcing. No lo veas como un gasto, sino como una inversión.


7 Consejos de liderazgo que nos deja la nueva película: Monsters University

La nueva película de Pixar entrega valiosos consejos sobre la importancia del trabajo en equipo y la perseverancia.

Por Belen Gómez Pereira

La más reciente producción de los estudios de animación Pixar, “Monsters University”, además de ser un éxito en taquilla, en su argumento contiene lecciones para los dueños de negocios. Ahora, los entrañables personajes de Monsters Inc. (Mike Wazowski y Sullivan) -rescatados para realizar la pre-escuela de la película estrenada en 2001- asisten a la universidad para convertirse en ‘asustadores’ profesionales.

Si bien la trama está diseñada para satisfacer al público infantil, lo cierto es que los adultos también la pueden disfrutar… y los emprendedores obtener valiosos consejos sobre trabajo en equipo y la importancia de la perseverancia para alcanzar metas. Toma nota:

1. Elige al mejor socio
El mejor socio para tener éxito es aquel que comparte una misma visión y tiene habilidades complementarias a las tuyas. Mientras que Mike es el ‘cerebro’ del equipo, Sulley tiene el talento natural y la fuerza física para asustar; además, uno representa la lógica y otro el instinto. Juntos, poniendo en práctica las fortalezas de cada uno y disminuyendo las debilidades del otro, consiguen idear exitosos planes a pesar de sus asperezas iniciales.

2. Saca lo mejor de tu equipo
Un buen líder es aquel que sabe explotar al máximo las cualidades (evidentes y ocultas) de los miembros de su equipo e inspirarlos a desarrollarlas. El monstruo verde de un solo ojo es un gran ejemplo de ello; aunque es forzado a trabajar con individuos que aparentemente no tienen talento alguno, él sabe motivarlos y encontrar sus aptitudes. Con el tiempo descubre que todos tienen algo que aportar para alcanzar las metas del grupo y que es necesario que trabajen juntos. 

3. No te dejes vencer
Wazowski no tiene la apariencia física para ser un asustador; de hecho, genera la burla del resto de los monstruos por su pequeño tamaño e imagen bonachona. Sin embargo, a pesar de esto consigue cumplir con mucha dedicación y esfuerzo sus sueños. Durante la película se enfrenta a numerosos obstáculos y fracasos (como la falta de aceptación y sanciones por mala conducta), pero tiene un objetivo en mente que lo motiva a generar nuevas estrategias y soluciones para llegar a él.

4. La universidad no lo es todo
Si bien los estudios son una buena base para obtener conocimientos, éstos son sólo el primer paso. El mundo real es muy diferente. Mike, quien era un gran estudiante y obtenía siempre las mejores calificaciones, pronto se da cuenta de que únicamente puede demostrarse a sí mismo si actúa en el mundo exterior. Cuando decide hacerlo nota que las cosas son muy distintas y que debe aprender a adaptarse a ellas.

5. Elimina tus miedos
Mientras que Mike vive en la continua afrenta de retos y no le teme a nada, Sulley constantemente es minado por sus propios miedos. Su temor y falta de confianza en sí mismo le impide sacar su máximo potencial y mostrar su talento ante los demás. Es sólo cuando decide superarlos y tomar riesgos que sabe que es capaz de lograr el éxito.

6. Empieza desde abajo
Cuando los monstruos entran a la importante compañía Monsters Inc. deben trabajar en todas las áreas de la empresa para conseguir su puesto soñado. Son mensajeros, cocineros y conserjes antes de transformarse en asustadores. La lección: solamente el trabajo duro y la perseverancia son las claves para llegar a la cima.

7. Apasiónate
La razón por la que este par de monstruos cumple sus metas es porque sienten gran pasión por ellas. Gracias a esto pueden superar fracasos, levantarse varias veces y estar dispuestos a sacrificar todo. Desde niño, Mike quería ser asustador y esta idea fue la que lo impulsó a enfocarse, dedicarse y hacerlo realidad. Además, Mike tiene otras cualidades similares a los emprendedores más exitosos: es capaz de sorprender y de retarse a sí mismo una y otra vez.

miércoles, 10 de julio de 2013

5 Medidas para conocer si eres emprenderdor

Autoevalúaete y descubre si cuentas con la personalidad, actitud y estilo de vida de un empresario exitoso.

Por Rebekah llif

¿Quieres iniciar tu propio negocio? Quizás eres del tipo de personas que resuelve los problemas ajenos, ambiciosa y que, desde niño, ha usado los ‘pantalones de jefe’. Pero, ¿te has preguntado si tienes lo que se necesita para ser exitoso como emprendedor?

Algunos dicen que el emprendedurismo puede aprenderse, pero yo no concuerdo. Los principios pueden enseñarse, pero la ejecución, las habilidades y la personalidad no. Hay un gran dicho que afirma que “la genética carga la pistola y el ambiente aprieta el gatillo”. Esta frase también aplica en los negocios.

En otras palabras, podríamos vivir en un ambiente construido para innovadores, pero también es importante comprender los factores psicológicos de un emprendedor. 

Te damos cinco factores que debes evaluar para saber si tienes lo que hace falta para ser empresario: 

1. Carácter
Los emprendedores exitosos requieren tener ciertas cualidades. Las más esenciales son la persuasión y las habilidades de liderazgo, de acuerdo a un reporte de Target Training International, que fue publicado en el blog de Harvard Business Review, 

En mi opinión, o eres persuasivo o no lo eres; parecido a que si eres un líder natural o no. Las variables del ambiente de cada persona pueden o no apoyar el desarrollo de estas habilidades, pero si cuentas con estas cualidades innatas, es más probable que tengas la personalidad de un emprendedor. 

2. Valores
Los sistemas de valores varían de una persona a otra. Sin embargo, una cosa permanece como cierta: Aquellas personas que son honestas y consistentes por lo general tienen la mentalidad de un emprendedor. La falta de valores crea líderes terribles que no tendrán nunca el respeto que hace falta para dirigir el cambio. 

3. Actitudes
La personalidad principalmente se determina por la genética, pero tu actitud hacia las circunstancias y ante las cosas que no puedes controlar es un indicador de tu habilidad para llevar un negocio. Si tienes una disposición negativa, una de “es imposible hacerlo” o eres muy pesimista, lo primero que debes hacer es una introspección seria. Mi segunda sugerencia es que te veas a ti mismo y te preguntes si puedes cambiar tu negatividad por optimismo. 

Los emprendedores son personas positivas; son realistas y lógicos, pero el optimismo es el que hace que el barco se mantenga a flote cuando sólo se acercan tormentas. También, esta cualidad ayuda a que sean personas agradables y carismáticas, capaces de mover montañas y guiar a los demás. 

4. Intereses
Tu historia personal es una buena fuente de información para buscar intereses. ¿Puedes pensar tiempo atrás y recordar aquello que te interesaba cuando eras niño? ¿Disfrutabas los retos, romper con lo establecido y cuestionar el estatus quo?

Si, por el otro lado, eras el típico niño que se encerraba a leer novelas de detectives, sacabas 10 de calificación en todo y nunca te metiste en un problema, quizás fuiste el mejor hijo para tus padres o el alumno ideal para los maestros, pero es posible que no tengas madera como emprendedor. Aunque, claramente, hay excepciones. 

5. Estilo de vida
Te despiertas a las 5 a.m. para hacer ejercicio. Revisas tu smartphone mientras corres en la caminadora. Tomas una ducha rápida y te vuelves a conectar a las 7 a.m. Después tienes reuniones y más reuniones. Vas a por un café con una chica que te gusta y regresas a la oficina a pensar cómo vender más. Te entrevistas con un medio. Tienes otra reunión, luego revisas mails y a las 8 p.m. cenas rápidamente para reunirte con un posible socio a las 10 para tomar un trago. Llegas a casa a las 11 p.m.
Este ritmo de vida tan ajetreado es común en los emprendedores, debido a que son personas que aman cada minuto y lo aprovechan al máximo. Para ellos, el trabajo no es trabajo. Es la vida.


¿Lo que deberías preguntarte antes de emprender tu propio negocio?

Descubre si estas preparado para renunciar a tu trabajo actual y dar el salto para convertirte en tu propio jefe.

Por Alina Dizik

Renunciar a la seguridad de un trabajo de tiempo completo para iniciar un negocio es una decisión riesgosa y hasta cierto punto, muy estresante. “La principal razón por la que la gente no renuncia es por el miedo a lo incierto. No saben qué pasará y no quieren sacrificar la seguridad que tienen”, dice Sean Ogle, quien dejó su trabajo para vivir en Tailandia y dirigir una firma de consultoría Web. 


¿Cómo puedes saber que es el momento ideal para dar el salto? Éstas son las 10 preguntas que debes hacerte antes de renunciar para emprender: 

1. ¿Eres miserable en tu trabajo actual?
Muchas personas creen que quieren ser emprendedores simplemente porque odian sus trabajos actuales. Desarrollar un plan de negocios puede ayudarte a evitar tomar decisiones impulsivas. Además de querer renunciar, debes tener una idea de negocios viable y un plan de marketing y de operaciones. En lo que trabajas en tu plan, conserva tu trabajo y los ingresos el mayor tiempo posible. 

2. ¿Cómo será tu nueva rutina diaria?
Tener libertad instantánea puede ser peligroso. Ogle recomienda crear un calendario a seguir, al igual que lo haces en un empleo. Cuando eres libre de elegir qué hacer con tu tiempo existe el riesgo de que dejes todo para después y que no termines tus tareas. A una semana de renunciar a su trabajo, Ogle empezó a ir al gimnasio en el mismo horario que antes, y trabajaba el mismo tiempo que en su antiguo empleo. 

3. ¿Cómo obtendrás dinero para mantener tu negocio?
La falta de capital es uno de los principales problemas al emprender. Por eso es esencial que hagas proyecciones realistas como parte de tu Plan de negocios antes de decidir si puedes o no solventar tus gastos.

Es probable que tu negocio no sea rentable los primeros tres o cinco años, por lo que debes ser realista al definir cuánto tiempo puedes mantenerte financieramente. Anticiparte a tus necesidades financieras te permitirá enfocar tu energía en construir tu negocio y no en preocuparte sobre cómo pagarás las cuentas. 


4. ¿Has considerado posibles costos imprevistos?
Cuando Jody Dyer lanzó Blackbird Tees, una tienda de ropa, se sorprendió de la cantidad de gastos que no había anticipado en su Plan de negocios. “Gastamos cientos de dólares experimentando con diferentes telas y tintas, destruyendo camisetas y haciendo elecciones incorrectas de color”, afirma Dyer, quien vende sus productos en Etsy. “En aquel entonces, esos errores nos estaban amputando financieramente”. En lugar de abandonar el negocio, Dyer regresó a ser freelance de medio tiempo para complementar los ingresos. 

5. ¿Estás dispuesto a tomar múltiples roles?
Iniciar un negocio significa que debes usar muchos sombreros. “Un día eres el encargado de la tecnología, otro eres vendedor, otro limpias”, dice Shobha Tummala, fundadora de una cadena de belleza del mismo nombre, con sede en Nueva York. Por eso, antes de dejar tu empleo, debes decidir si estarás feliz haciendo las numerosas funciones que requiere un nuevo negocio. 

6. ¿Cuáles son tus fortalezas y debilidades?
Mientras consideras los múltiples roles, sé honesto contigo mismo sobre aquello que haces bien y aquello que debes mejorar, aconseja Tummala. Quizás necesites impulsar tus conocimientos de finanzas o de programación, o buscar a un socio que te complemente. Si no tienes forma de superar tu debilidad, tal vez te convenga conservar tu empleo hasta que lo consigas. 

7. ¿Quiénes serán tus competidores y clientes?
Aunque es posible que no puedas validar completamente el mercado potencial para tu concepto de negocio, al menos debes entender quiénes serán tus clientes y qué tipo de competencia tendrás. Si no estás seguro, considera atender tu idea a medio tiempo y probarla con un ‘lanzamiento suave’ antes de invertirle demasiado tiempo y dinero.

8. ¿Cuentas con apoyo?
Para facilitarte esta transición, comparte tus planes de emprendedor con los miembros de tu familia y amigos para ver si te apoyarán en las dificultades de emprender. Sé muy explícito con los riesgos, ya que cuando una persona emprende, todos en la familia son afectados.

9. ¿Tienes una opción de backup?
Desarrollar un plan B antes de emprender te ayudará a evitar quedar expuesto si fracasas. Piensa si hay algo que puedas hacer a medio tiempo en caso de necesitar generar dinero de otras fuentes o si, por el otro lado, debas buscar otro empleo de tiempo completo si tu idea no funciona. Para mantener abiertas tus opciones, mantente en contacto con reclutadores, jefes anteriores y contactos de networking. 

10. ¿Cómo evitarás las asperezas?
Si decides renunciar, recuerda que tu ex jefe te puede ser de ayuda para lanzar tu nuevo negocio. En lugar de renunciar abruptamente, piensa cómo puedes hacerlo para salir bien parado. Dile con anterioridad que piensas renunciar y sé abierto con tus planes como emprendedor a futuro. “Generalmente las empresas lo entienden y ofrecen ayuda de ser posible”, afirma Ogle. Tus jefes pueden ayudarte dándote un horario flexible o algún consejo.